Conclusiones de Seminario Internacional de asistencia específica e integral a las víctimas del terrorismo en Europa
Las víctimas del terrorismo no son víctimas de una criminalidad cualquiera, son víctimas de los enemigos de la democracia. Esta circunstancia hace que sean un símbolo de la defensa de la libertad y del Estado de Derecho frente a la amenaza terrorista.
Esta significación pública de las víctimas del terrorismo requiere que, por parte de las instituciones -tanto nacionales como internacionales-, se les garantice una protección integral, coordinada, especializada, cercana y específica.
El componente de trasnacionalidad –tanto por la pluralidad de países afectados como por la multinacionalidad de sus víctimas- de la amenaza terrorista requiere de una respuesta específica por parte de las instituciones europeas.
Si bien es cierto que la última Directiva contra el terrorismo sienta las bases mínimas en lo que a la protección de las víctimas del terrorismo se refiere, consideramos que todavía quedan pasos importantes por dar, de ahí que por parte de los participantes en el I Seminario Internacional sobre Asistencia Específica e integral a las víctimas del terrorismo en Europa celebrado en Madrid los días 8 y 9 de junio de 2017 realicemos las siguientes recomendaciones:
Articular los mecanismos necesarios para potenciar la cooperación entre los diferentes actores intervinientes, tanto de la administración pública como del movimiento asociativo, en lo que a la asistencia a las víctimas del terrorismo se refiere.
Desarrollar políticas antiterroristas y de seguridad centradas en la figura de las víctimas del terrorismo y en su protección.
Establecer redes de coordinación entre las diferentes asociaciones europeas dedicadas a la asistencia a las víctimas del terrorismo que permitan asistir a las víctimas con independencia de su nacionalidad y del lugar de comisión del atentado terrorista.
Impulsar la creación de una Oficina Europea de atención a las víctimas del terrorismo dependiente de la Comisión Europea que centralice las diferentes oficinas y organismos existentes en los diferentes Estados miembros.
Estudiar la conveniencia y la posibilidad de creación de un Fondo de compensación común para el resarcimiento de los daños producidos a consecuencia de atentados terroristas cometidos en el ámbito de la Unión Europea.
Concienciar de la necesidad de una legislación específica en cada uno de los Estados miembros específicas para las víctimas del terrorismo, así como en el ámbito europeo.
Potenciar la formación específica en asistencia a víctimas del terrorismo de profesionales del ámbito psicológico, jurídico y social para ofrecer a las víctimas del terrorismo una asistencia específica, profesional y cercana.
Necesidad de establecer protocolos de actuación común en el ámbito europeo sobre diferentes aspectos propios de las víctimas del terrorismo como:
Protocolos de actuación en lo que a los servicios de emergencia se refiere. Destacando la importancia de la emergencia y la necesidad de coordinación de todos los servicios de emergencia. Así como la preparación y formación para comunicar malas noticias a las víctimas. Primar la protección tanto de la víctima como del profesional.
Protocolo de primera actuación tras la comisión de un atentado terrorista con necesidad de adaptación a niños y adolescentes.
Protocolo de actuación para atentados a gran escala, con un gran número de víctimas mortales y teniendo en cuenta la trasnacionalidad de las víctimas.
Protocolo sobre papel de los medios de comunicación tras la comisión de un atentado terrorista, estableciendo un catálogo de buenas prácticas para los medios de comunicación para el tratamiento de atentados.
Potenciar la participación de la víctima del terrorismo en todas las fases del proceso judicial, tanto civil como penal, sirviéndose de la posibilidad de participación de las asociaciones de víctimas del terrorismo en el proceso para evitar sufrimientos añadidos a las víctimas del terrorismo. Asimismo se deberán de articular los mecanismos necesarios para el fácil acceso a las indemnizaciones por parte de las víctimas.
Impulsar políticas de memoria de las víctimas del terrorismo para crear un conocimiento público y social del fenómeno del terrorismo tanto a nivel interno de cada Estado como a nivel europeo.
