El presidente de la AVT, Juan Antonio García Casquero, considera "aberrante" que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco haya denegado la suspensión cautelar de la convocatoria de ayudas a los presos asesinos de ETA. García Casquero asegura que la AVT "no puede callarse, moralmente, ante una barbaridad como ésta, pues, ¿es qué acaso se nos paga a nosotras, las víctimas, viajes a los cementerios para ver a nuestros familiares?"
Es la respuesta de la AVT a una decisión, la del Tribunal Superior de Justicia Vasco, que abre un nuevo capítulo al recurso interpuesto el pasado 7 de abril por la Abogacía del Estado contra la convocatoria publicada el 24 de marzo en el Boletín Oficial del País Vasco (y dictada por la anterior consejería de Justicia, dirigida por Joseba Azkárraga) por la que concedía 225.081 euros en ayudas a los familiares de los presos de ETA.
Según el auto "no se aprecia con la evidencia necesaria" que esas ayudas transgredan los derechos a la paz, la libertad y la convivencia recogidos en la Ley de Reconocimiento y de Reparación de las Víctimas del Terrorismo, ya que aunque se admita que en la mayoría de los casos tales ayudas irán a familiares del "círculo etarra", "ello no entraña necesariamente una legitimación ética, social y política del terrorismo".
Hasta ahora siempre fue el gobierno nacionalista vasco el que concedía estas ayudas, algo a lo que se ha opuesto claramente el nuevo ejecutivo liderado por Patxi López. Para la AVT resulta "inaudito que sea el Tribunal Superior Vasco el que legitime estas ayudas". Aún así es sólo una batalla. Esta resolución puede ser recurrida en la misma Sala de lo contencioso-administrativo en un plazo de cinco días desde su notificación. Además, lo que es la impugnación de las ayudas, por parte de la Abogacía del Estado, sigue su curso.
Desde la AVT levantamos la voz contra lo que nos parece un insulto y una humillación. Los datos son claros: sólo el año pasado 267 personas fueron beneficiarias de estas ayudas, recibiendo una media de 818 euros, aunque en algunos casos la ayuda se queda en 42 euros y en otros llega hasta los 1.700 euros.