ACTUALIDAD - 11-03-2010

El Congreso homenajea a las víctimas del 11M

La Sala Internacional del Congreso de los Diputados ha acogido esta tarde el homenaje a las víctimas del 11-M, seis años después del atentado. José Bono presidente del Congreso, ha presidido el acto junto a las tres representantes de las asociaciones de víctimas de este atentado: Ángeles Pedraza, Ángeles Domínguez y Pilar Manjón, vicepresidenta de la AVT, Presidenta de la Asociación de Ayuda al 11M y Presidenta de Afectados 11M, respectivamente. También presente, Maite Pagazaurtundúa, Presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, organizadora del acto.

Pagazaurtundúa ha abierto el acto señalando que "la lectura de la Declaración de los Derechos Humanos es la manera de decir NO a los fanáticos". Tras ella han leído la Declaración de los Derechos Humanos también Manjón, Domínguez y Pedraza que ha cerrado con el último de los artículos. Pagazaurtundúa ha tenido un recuerdo especial para Justo antes de iniciar con ella, ha recordado a "Laura, que seis años después continúa sin despertar".

Tras los representantes de las asociaciones, ha llegado el turno de los niños. Una docena de jóvenes, con edades comprendidas entre los 6 –algunos no llegaban ni al atril-y 20 años, han leído uno por uno, el nombre de todas las víctimas que fallecieron hace hoy seis años en los atentados del 11M. Ese ha sido uno de los momentos más emotivos del acto, en el que muchas de las víctimas presentes han mostrado con mayor expresividad sus emociones.

Asimismo, un quinteto de cuerda del Conservatorio de Cáceres ha interpretado dos piezas del compositor Piazzola durante diez minutos. Al finalizar su actuación todos los presentes han aplaudido, rompiendo así el silencio respetuoso y sobrecogedor que se había creado en la sala.

Para cerrar el acto, ha tomado la palabra el presidente del Congreso, José Bono, que ha señalado que en situaciones como estas "las palabras se vuelven torpes y cortas -aún cuando en el Congreso estamos habituados a hacer uso de la palabra- cuando se piensa en la magnitud de la tragedia, especialmente viendo en persona los rostros de las víctimas, con sus semblantes emocionados".

Para Bono "nombrar a los asesinados del 11M y el minuto de silencio tiene sentido, no es un rito. Celebrar este acto tiene sentido porque, aunque se avive el recuerdo y el dolor, sirve para revivirles en el corazón porque nadie muere del todo mientras no se le olvida...Porque se les revive en el cariño de cada uno".

Finalmente se ha concluido con un minuto de silencio que todo el mundo ha respetado escrupulosamente.