La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) y Dignidad y Justicia (DyJ) respetan, pero no comprenden ni comparten la decisión tomada por la Audiencia Nacional de absolver a los acusados por el "caso Egunkaria". Esta decisión –esperada de antemano por la trayectoria que ha seguido todo el proceso- supone un flaco favor a la lucha antiterrorista y un retroceso importante en la lucha contra el entorno de ETA.
Por ello, mantenemos de forma tajante que Egunkaria, como hemos querido demostrar tanto la AVT como DyJ a lo largo del juicio, formaba parte del entramado mediático de ETA. Además, la indemnización que el Estado tendrá que pagar a los acusados se convertirá en dinero que servirá para financiar el entorno terrorista, con todo lo que eso supone.
Es necesario recordar que la Fiscalía desapareció misteriosamente del "caso Egunkaria" en pleno proceso de negociación durante la anterior legislatura. Y el mismo Fiscal que tomó esta decisión fue quien en un principio, decidió que había lugar a la investigación.
La Audiencia Nacional tiene que seguir una misma línea en las decisiones que toma respecto al terrorismo, ya que cada paso atrás da ventaja a los asesinos y su entorno en futuros juicios y en futuras acciones terroristas.
Remarcamos que esta decisión resulta un duro golpe a la lucha contra el terrorismo, algo en lo que, como han insistido siempre la AVT y Dignidad y Justicia, es un proceso en el que todos debemos ir unidos para no dar alas ni a los terroristas ni a los que les apoyan.
Asimismo, es necesario recordar la denuncia hecha por la AVT y DyJ hace unos meses ante la desmedida presión política que ha existido para conseguir el archivo del caso Egunkaria. Partidos políticos, instituciones democráticas y medios de comunicación han tomado partido –por primera vez y de manera descarada- por los acusados y no por las víctimas del terrorismo. Esto es algo que quisiéramos que sirviera de precedente de lo que NO debe hacerse respecto a un proceso por un delito de terrorismo.
Además, se ha intentado vender que la acusación que ejercían las víctimas iba contra la cultura vasca y la libertad de expresión. Todo lo contrario, la AVT y DyJ han actuado –y siempre lo harán- contra la cultura del miedo y el terror, la que imponen las armas.