El Centro de Adiestramientos Especiales de la Unidad de Acción Rural de la Guardia Civil en Logro">
El Centro de Adiestramientos Especiales de la Unidad de Acción Rural de la Guardia Civil en Logroño acogió el emotivo funeral en memoria del capitán de la Guardia Civil, José María Galera Córdoba y el alférez Abraham Leoncio Bravo Picallo, asesinados el pasado miércoles en un atentado terrorista en Afganistán junto al intérprete de nacionalidad española Ataola Taefik Alili, que será enterrado en Cuarte de Huelva (Zaragoza).
En el acto celebrado en la sede de la UAR en Logroño –en la que estaban destinados los dos agentes del Instituto Armado- estuvo presente una representación de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) encabezada por su presidenta, Ángeles Pedraza. La delegación de la AVT, que se ha puesto a disposición de las familias de las tres víctimas, estaba completada por el vicepresidente José Marco, el coordinador de Deportes y Eventos, Miguel A. Folguera, y el delegado de la AVT en La Rioja, Fernando San Martín.
El emotivo acto celebrado en Logroño estuvo presidido por los Príncipes de Asturias, que en todo momento se mostraron muy cercanos a las familias. El Príncipe Felipe impuso a los guardias civiles las cruces al mérito militar con distintivo rojo, máxima condecoración para los fallecidos en actos terroristas o por actos heroico.
Además de cientos de ciudadanos y ciudadanas de Logroño que quisieron dar su último adiós a los dos agentes, estuvieron presentes muchas autoridades como los ministros de Defensa e Interior, Carme Chacón y Alfredo Pérez Rubalcaba, además de la mayoría de los altos mando de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y numerosos cargos políticos.
El funeral fue oficiado por el arzobispo castrense, Juan del Río, que señaló lo "difícil que es encontrarle sentido a estos acontecimientos", señalando que los actos terroristas "repugnan a la razón, degradan la dignidad humana y enfrentan a los pueblos".