La Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) ha presentado en la mañana del 23 de diciembre una denuncia ante la comisión deontológica del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid contra los médicos forenses de la Audiencia Nacional Vidal Santos Yusta y Leonor Ladrón de Guevara por el informe que emitieron acerca del estado de salud del asesino terrorista Jesús María Uribecheberria Bolinaga.
Mientras que las víctimas del terrorismo tenemos que soportar la segunda Navidad que este asesino pasará fuera de la cárcel mientras los familiares de sus víctimas tienen que ir al cementerio para estar con los suyos, seguimos denunciando más detalles del turbio proceso que permite que este asesino siga, a día de hoy, en libertad.
En el escrito presentado (acompañado de todos los documentos necesarios que lo sustentan), la AVT denuncia que ambos médicos se personaron el pasado 25 de septiembre en el Hospital Donostia para proceder al reconocimiento de Bolinaga. Ambos estuvieron presentes durante una visita médica preparada para dicho día pero no practicaron la exploración acordada por el Juzgado, incumpliendo la orden judicial.
La AVT somete al dictamen de la comisión deontológica del Colegio de Médicos de Madrid si hubiera sido preceptivo que, tras el estudio de la historia clínica, no habría sido necesario indicar datos concretos de la misma que fundamenten las conclusiones que posteriormente establecen utilizando términos como "ligero aumento" u "objetivamente desfavorable", sin atisbarse precisión alguna.
Así mismo, señalan en su informe que el asesino presenta ciertas alteraciones analíticas que ni cuantifican preguntando al Colegio de Médicos de Madrid si hubiera sido necesario cuantificar dichas alteraciones analíticas que sirven de soporte a sus conclusiones.
También expresamos nuestra confusión ya que en el informe se habla de un "empeoramiento" objetivo del enfermo pero no indican dato alguno para llegar a esta conclusión, más aún sin haber realizado ellos exploración alguna. Llegan hasta ese punto habiendo, únicamente, presenciado la revisión del terrorista.
Curiosamente, en dicho informe se presenta una amplia descripción del medicamento Everolimus que, presumiblemente, será administrado a Bolinaga en un futuro. Pero en el informe nos encontramos con una labor de corta-pega que va desde la ficha técnica del medicamento y sus posibles efectos secundarios.
Otro de los puntos más curiosos es la minuciosa descripción que hacen ambos médicos en el informe del módulo sanitario del Centro Penitenciario de Tafalla. ¿Qué sentido tiene algo así en un informe sobre un enfermo de cáncer?
No obstante, señalan que dicho centro penitenciario no es el lugar más adecuado para que Bolinaga reciba tratamiento porque necesita "un entorno más favorable tanto desde el punto de vista psíquico como físico". Sin embargo nos planteamos una pregunta: ¿Para llegar a tal afirmación no habría sido necesaria una exploración psicológica que sostuviera dicha información?
También se hace hincapié en la denuncia presentada por la AVT ante el Colegio de Médicos de Madrid en la supuesta esperanza de vida otorgada al asesino. El informe de Vidal Santos Yusta y Leonor Ladrón de Guevara señala que "el pronóstico vital del penado se mantiene en similares términos que constan en diversos informes técnicos". ¿Tenemos que entender que ratifican el pronóstico de 7 meses y 29 días de esperanza de vida para Bolinaga emitido por el Hospital Donostia hace ya más de 15 meses?
Por último, ambos forenses de la Audiencia Nacional señalan en su informe que "a la vista de los informe médicos estudiados, resultados de las pruebas realizadas y datos obtenidos de la consulta médica, no es previsible que el óbito se produzca en los próximos cuatro meses". Ninguno de los datos que citan aparece en el informe.
Además, recordamos que los estudios de supervivencia que pueden encontrarse en la literatura médica expresan periodos probables de supervivencia, no de ausencia de muerte. ¿No habría sido perceptivo indicar en un informe forense, además, los estudios científicos en los que basan esa información que es totalmente contraria a la ciencia? ¿No estaremos ante una manipulación cuando se afirma cada cuatro meses que el enfermo no fallecerá en los cuatro meses siguientes?
Desde la AVT no podemos entender cómo hemos llegado hasta este punto. ¿Por qué se desobedece el mandamiento del Juez Castro para realizar un informe a Bolinaga a instancias de la Fiscalía y la AVT que lo pidieron hace ya seis meses? ¿Por qué, una vez conocido que se ha desobedecido dicho mandamiento, el juez Castro no ha movido un dedo? ¿Por qué tanto interés en mantener a este asesino en libertad pese a las evidencias que muestran que podía ser perfectamente tratado en prisión?